NO HAY TIEMPO PARA LAMENTOS
Olimpia cayó ante Libertad por 2-1 en la final de la Supercopa, en lo que fue el primer encuentro oficial del año.
El partido fue muy disputado, aunque por momentos impreciso, mostrando que ambos equipos aún estaban saliendo de la pretemporada. Olimpia golpeó primero con un gol de Darío Benedetto, pero la jugada fue anulada por posición adelantada de Derlis González. Antes del final del primer tiempo, Libertad abrió el marcador con un tanto de Matías Espinoza.
En el complemento, el equipo gumarelo aprovechó un error defensivo para aumentar la ventaja con un gol de Santa Cruz. A 15 minutos del final, Derlis González descontó, pero cuando parecía que el Decano reaccionaría, Libertad neutralizó sus intentos y aseguró el título, dejando a Olimpia con las manos vacías en su tercera final de Supercopa Paraguay. El Rey de Copas tuvo la oportunidad de ser el equipo con más títulos en este certamen, pero no se dio.
La derrota supone un duro golpe a la gran expectativa generada por el Franjeado tras la contratación de refuerzos de renombre para esta temporada. Este resultado obliga aún más a los dirigidos por Martín Palermo a enfocarse en sus objetivos principales: la defensa del título en el Torneo Apertura, que inicia este domingo a las 18:15 ante Guaraní, y una destacada actuación en la Copa Libertadores.
El Decano sabe que no hay tiempo para lamentos. La historia demanda grandeza y compromiso, y ahora deberá levantarse para estar a la altura de las exigencias de su gloriosa gente.
